Adoradores en espíritu y verdad

Se supone que deberíamos salir de nuestra congregación dominical transformados, renovados y restaurados a través de la palabra dada por Dios, lo cual generalmente pasa, pero también generalmente pasa que al abandonar el recinto olvidamos el mensaje recibido, el cual, deberíamos aplicar en la semana que recién comenzará y a lo largo de nuestra vida. Se nos olvida que debemos procurar acercarnos a Dios con nuestro corazón arrepentido, agradecido y lleno de amor en todo momento, y no solo por necesidad, angustia, desesperación o porque es domingo, ya que a Él lo necesitamos TODOS los días de nuestra vida.
El orar al despertar, al salir de casa, comer e ir a dormir no es suficiente, todo eso no es mas que requisitos básicos en la vida de un cristiano que se precie de serlo, pero en realidad no lo son todo!!!!
La palabra de Dios dice que Él busca adoradores que le adoremos en Espíritu y verdad, es decir con toda el alma y en todo momento (Juan 4:24), demostrado así amor y agradecimiento por todo lo que ya ha hecho por nosotros.

Creo que si pudiéramos realmente entender el regocijo en el corazón de Dios, cada vez que lo buscamos por deleite espiritual y no por una angustia temporal o rutina establecida, nunca dejaríamos de adorarle con todo el corazón.

La vida en estos tiempos exige mucho de nosotros y todos esos afanes nos hacen sepultar lo sagrado y darle prioridad a lo urgente. Ejercitemos nuestro amor y agradecimiento a Dios con conversaciones sencillas con El, diciéndole "gracias Señor por el aire que respiro, porque estoy de pie, porque me has dado vida y salud, porque tengo sustento para mi hogar etc"
Hay muchas cosas por las cuales agradecer en este día, y si por alguna razón este no es el mejor día de tu vida, no te límite!!!!!! también dale gracias porque en medio de la dificultad Él sigue siendo Dios, sigue siendo fiel y nos ayuda en toda necesidad. Reclama para ti esa paz que sobre pasa todo entendimiento y entonces sabrás o recordarás lo que es la paz en medio de la tormenta.
Esta reflexión no busca ser un reclamo y mucho menos una condenación sino mas bien una conexión divina con ese Dios maravilloso que anhela que nos acerquemos al trono de su gracia, para así alcanzar su oportuno socorro.
Dios es un padre amorosos que se deleita al escuchar la melodiosa voz de quienes lo buscan, siempre está dispuesto a darle consuelo a nuestro corazón herido y angustiado, el no excluye, el nos incluye entre los amados de su corazón.
- Vamos, honremoslo también con el corazón apliquemos su palabra en nuestro diario caminar ya que solo haciendo bien lo que nos corresponde podremos ser parte del cambio -
Feliz inicio de semana.